Читайте новые
книги

Читать книгу Ya no me duele онлайн на КулЛиб

Лили Рокс

Ya no me duele

Aparición de Félix

Estoy rodeada de paredes de un color verde sucio. Es como si alguien hubiera elegido a propósito el tono más repulsivo para recordarme aún más en qué agujero me encuentro. Las rejas en la estrecha ventana apenas dejan pasar la luz, pero no trae ni alivio ni esperanza. Como una burla a mi impotencia, está ese vano de puerta vacío, sin puerta. Adelante, inténtalo. De todos modos, te detendrán. Sal y verás los mismos rostros deformados, la misma vacuidad. Intento dar un paso, pero no hay a dónde ir. Y tampoco hay por qué.

Mi vida se ha roto en pedazos como un vidrio fino, cuyos fragmentos ya no se pueden recoger. Y aunque fuera posible, no habría nadie para hacerlo. Me he quedado sola. Completamente inútil para cualquiera, sobreviviendo únicamente para quedar atrapada en este horrible limbo. Si no fuera por el cambio de día y noche que veo por la ventana, pensaría que este día nunca termina. Los mismos enfermeros, con sus rostros que solo me provocan repulsión. Toscos, indiferentes, con ojos que no muestran ni un rastro de compasión. Los pacientes son iguales. Miro sus caras distorsionadas y comprendo: estoy entre ellos. Soy una de ellos.

La comida es tan insípida como mi vida. Mastico esta masa gris sin siquiera preguntarme por qué. Simplemente, para evitar otro golpe de los enfermeros. No siento el sabor, como tampoco siento ya nada más. La comida, como todo lo demás, es solo una parte de un mecanismo que debe seguir funcionando. ¿Pero para qué?